Hoy hemos navegado todo el día por el lago Argentino entre
inmensas masas de hielo. Creo que sólo nos falta ver el glaciar desde abajo
porque el primer día lo caminamos con grampones, lo vimos desde unas pasarelas
y hoy finalmente desde un barco, Pero el glaciar más bonito es sin duda
uno con nombre italiano, Spegazziníi alto y rotundamente azul, que sólo puede
verse desde el agua.
Mientras, los glaciares se desangran y dejan icebergs inmensos
en el lago, sobre todo en el que llaman canal de los témpanos donde todo es
como sacado de un escenario. Parece imposible que haya vida aquí pero la
naturaleza se las ingenia para crear insectos rellenos de glicerol
anticongelante y los caballos y vacas salvajes resisten todas las temperaturas.
Es imposible recrear la Inmensidad.
(ii)
Ayer tenia una cita Importante. Hacía tanto frío en el bus
que se me helaba la respiración en el cristal mientras
atravesábamos km de carreteras inmensas, solitarias, A los
lados sólo manadas de guanacos y algún cóndor
despistado. Y de repente aparece el Fítz Roy. La cordillera
hace un alto y emerge. El pueblo del Chaltén está a sus pies, fruto de las
prisas porque los chilenos no revindicaran estas tierras, así que las casas son
de lata, cartón o piedra según las posibilidades. Empezamos una ascensión hasta
la laguna Capri que ahora está congelada. Durante dos horas la montaña
desaparece de la vista y sólo quieres seguir subiendo para volver a verla. En
el camino pájaros carpinteros, liebres y cóndores de nuevo. Y silencio. Sólo
silencio, A lós pies de la laguna helada, ésto. No tengo palabras.